Yo Rosa López Díaz,
Integrante de la organización Solidarios de la Voz del Amate,
Presa injustamente.
Compañeros, compañeras, anciones y niños muy buenos dias a todos ustedes aquí presentes y el público en general y los que no pudieron venir por x motivos de igual manera nuestros saludos.
Hoy 8 de enero del año 2012 tengo el gusto de compartirles una breve historia y a la vez una experiencia durante los 39 dias de ayuno que fue lo duro y lo más dificil.
Primero: es duro tomar una decisión sobre todo aquí en la carcel para poner resistencia en contra de la injusticia, hay que estar consciente, tener conciencia es amar a la vida, amarse a uno mismo, es por ello que el día miercoles 28 de septiembre del año 2011 la organización la Voz del Amate y conjuntamente con los Solidarios de la Voz del Amate, todos adherentes a la Otra Campaña del EZLN, todos tomamos la decisión que ya era tiempo de sacar nuestras voces hacía la sociedad de la injusticia que estamos viviendo de nuestros encarcelamientos injustos. Fue así que el día 29 de septiembre siendo a las 10:30 de la mañana nos declaramos unos en huelga de hambre y otros en ayuno y plantón en tiempo indefinido, uno de ellos soy yo. Comence mi primer dia de ayuno, no niego tuve miedo, me sentía sola, tuve miedo cuando el director me dijo que dejara de hacer lo que yo estaba haciendo, y que no me lastimara así dejando de comer, y que sola me sentí cuando me dijo que me iban a quitar a mi hijo, pero aún así no le mostré miedo, yo le conteste que no podían quitarme a mi hijo, al día siguiente llegó una licenciada de la fiscalía de la mujer amenazandome con quitarme a mi hijo, sino quería que pasara eso tenía que dejar mi ayuno, yo le conteste usted no puede venir a pedirme que deje mi ayuno, y menos con amenazas asi que puede hacer lo que quiera pero mi hijo se queda conmigo y me dice te lo voy a quitar ya lo verás, y se fué. Yo no sabía que hacer, solo le hablé por telefono a un compañero explicandole lo que había pasado y él me dijo no te preocupes no te lo pueden quitar, así pasaron tres días hasta que llegó el día domingo llegan los compañeros a visitarme, me dicen animo no estás sola, los compañeros de la huelga están bien están contigo y nosotras también, fué así donde empece a sentir confianza en mi misma el saber que muchos de los compañeros y compañeras allá fuera estaban pendientes de mi, ya no me sentía sola. También llegaron a tomarle fotos a mi hijo, el psicologo subía hasta mi celda a tomarme fotos y a pedirme que yo comiera porque dejar de comer podía darme diabetes, yo lo que le decía era gracias lo tomaré en cuenta, pasaron los días más ganas me daba de seguir luchando solo al ver a mi hijo tan pequeño e inocente sin tener ningún delito está aquí conmigo viviendo trás las rejas, a veces mira un juguete o algo que el desea comer me parte el corazón porque no le puedo comprar, ese dolor y tristeza de ver a mi hijo que no puede vivir su niñez como debe de ser, ese dolor me motiva a seguir luchando en contra de la injusticia que hay en nuestro país, así seguí con mi ayuno dia tras día con amenazas y hostigamientos, pero con la ayuda de Dios y el de ustedes pude superarlo hasta el día 2 de noviembre me llega la noticia más dura, la más dificil diciendome mi madre que mi hijo Natanael ya había fallecido el día 26 de Octubre, no podía creerlo cuando mi madre me lo dijo, en ese momento sentí que todo se había acabado y me dije hasta aquí, no más, el dolor y la muerte de mi hijo me desgarró el alma, me sentí tan impotente como encadenada de pies a manos, porque no pude ir a despedirme de mi hijo, sentí que en esos momentos ya no iba a poder seguir, ese día no comí, tampoco al siguiente día, me puse a llorar y a recordar que mi hijo había nacido enfermo por los golpes que me dieron y murió siendo un bebe indefenso de 4 años, y hoy me pregunto los culpables de la muerte de mi Natanael qué castigo han recibido, ninguno, ellos siguen felices disfrutando de la vida, siguen ejerciendo el poder que tienen para seguir torturando a más mujeres inocentes, entonces dije, no, esto no es razón para callarme, sino para seguir adelante, mi dolor me impulsó el coraje y la rabia es digno de mi dolor, mi otro motivo fué mi hijo Leonardo, me veía llorar y me abrazaba, al escucharle su dulce voz que me consolaba me decía mama ya y me secaba mis lagrimas, me di cuenta que no debo de dejar de luchar, tengo que seguir luchando por él por sus derechos, tiene que tener una vida digna como todos los niños, me di cuenta que durante mi ayuno me sirvió para darme valor, aprendí de no tener miedo, de no sentirme sola, de no dejarme pisotear, porque tengo dignidad para defender mis derechos, porque se que no estoy sola, por la injusticia que hay mi hijo Leonardo no tiene una vida digna, y no debe vivir en la carcel, en memoria de mi hijo Natanael seguiré luchando en contra de la injusticia para que ni una madre sufra lo que yo estoy sufriendo. Durante mi ayuno aprendí a tener confianza en mi misma, ahora sé que tengo derechos, y que los tengo que hacer valer, se que con la ayuda de Dios y el de ustedes podré seguir con mi lucha, también el tener a mi hijo aquí conmigo me da fuerzas para seguir adelante, no tengo que callar sino que tengo que gritar ante tanta injusticia que hay en nuestro país, sobretodo en Chiapas, estoy convencida que solo luchando juntos podremos cambiar nuetro país y nuestro México a quien tanto amamos. Compañeros y compañeras yo les invito que no nos cansemos, no nos desanimemos, tarde o temprano llegará la justicia que tanto anhelamos porque Dios es justicia y amor, les deseo a todos que este principio de año 2012 sea de mucho éxito para todos nosotros. Estas fueron mis palabras, les doy las gracias por haberme escuchado.